14 Plantas de Exterior Resistentes al Frío Invierno

Escoger las mejores plantas para el jardín no siempre es sencillo. Son muchas las variedades que existen y todo dependerá de los gustos de cada uno. Por supuesto, habrá que tener en cuenta también el lugar en el que se van a situar, si suelen recibir sol, viento o agua.

Y la cosa se complica todavía más si hablamos de encontrar aquellas plantas de exterior que puedan soportar el duro y frío invierno. Si no sabes por dónde empezar, aquí tienes algunas ideas de plantas de exterior muy resistentes.

Arce japonés

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¿Quieres tener en tu jardín un arbusto que sea resistente y que, además ofrezca una apariencia totalmente única? No hay ninguna planta que se le parezca en Occidente, debido a su procedencia asiática. Además, es tan manejable que en muchas ocasiones se planta y se trata como un bonsái.

Otro de los aspectos que más llama la atención del arce japonés es la forma de sus hojas, que son palmadas. Y, respecto a sus cuidados, ten en cuenta que no debería darle el sol directamente y que es adecuado trasplantarlo aproximadamente cada dos años.

Aspidistra

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Si no conoces a esta planta por el nombre de aspidistra, es posible que te suene más si te decimos que se le conoce comúnmente como pilistra. Se considera una planta ornamental, y, aunque si se planta en tierra florece cuando termina en verano, plantada en maceta no suele ofrece flor. Y si lo hace es muy pequeña y está oculta.

Sin embargo, no son necesarias las flores para que la aspidistra luzca bonita y robusta, ya que suele alcanzar casi el metro de altura, si se le deja, y puede aguantar muy bien tanto en interior como en exterior.

Lavanda 

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Tienes en mente la característica forma y las coloridas flores de la lavanda, ¿verdad? Además, su aroma y sus propiedades son también reseñables. Pero hay que decir que en invierno tu planta de lavanda aguantará muy bien el frío y la lluvia, pero no podrán hacer lo mismo sus flores.

Y es que la floración de la lavanda comienza en primavera y termina antes de que finalice el verano, por lo que ya con la llegada del otoño es más que probable que tu planta no tenga flor. 

De cualquier forma, con la lavanda te asegurarás tener en el jardín de tu casa una planta de invierno muy resistente y fuerte. Y no te librarás de su peculiar morado, ya que muchas otras partes de la lavanda presentan esta tonalidad aparte de la flor.

Acebo

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¿Quién dijo que el acebo se podía usar solo en Navidad? A pesar de que en muchos países es tradición adquirir esta planta y decorar el hogar con ella en esta época del año, nosotros queremos recomendarte que la uses para dar luz y un toque de color a tu jardín durante todo el invierno. 

El motivo es que se trata de una planta realmente resistente y que, por si fuera poco, ofrece algo que muy pocas ofrecen: frutos. Son ellos los encargados de crear una combinación interesante entre su color rojo y el verde intenso de sus hojas. 

¡Un consejo! No se te ocurra ingerirlos, porque son tóxicos.

Col ornamental

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¿Quieres tener en un jardín una planta resistente al frío, original y colorida, aunque no ofrezca flor? Pues bien, una de las mejores opciones en este caso es la col ornamental, cuyo origen se encuentra en la zona del Mediterráneo. También se la conoce como col de jardín, símbolo inequívoco de que colocarla en el tuyo será una muy buena idea.

Y, como para el resto de las propuestas que te presentamos, no tengas miedo de su resistencia durante el invierno. En este caso, además, su colorido se intensificará gracias a las heladas. Eso sí, necesita también bastante luz del sol.

Cotoneáster

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Volvemos a proponerte otra opción de planta invernal con frutos para tu jardín. Hablamos del cotoneáster, un arbusto que crece sobre todo en las altas montañas de Asia, África y Europa. Este dato puede darte una idea de lo bien que resiste esta planta el frío y el viento. 

Lo que más requiere, por otro lado, es que la protejas del sol si vives en un clima cálido, y que sigas algunos cuidados básicos si vives en un clima muy frío. Entre ellos, que le cortes las ramas rotas, enfermas o que se hayan cruzado entre sí. También los frutos que veas más estropeados conviene que sean arrancados.

Como curiosidad, es una planta que suele ser cultivada también como bonsái. 

Hiedra

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A pesar de que la fama de la hiedra la convierte en una planta enredadera que es capaz de cubrir paredes y techos, bien colocada y cuidada es capaz de lucir muy bonita en tus macetas o en tu jardín. Además, aguanta muy bien la falta de luz y el frío, características propias de la estación invernal.

Algo muy habitual en la hiedra es que sufra alguno de los diferentes tipos de plagas. Si quieres evitarlas y que tu planta dure todo el invierno, lo mejor es que la riegues abundantemente si vives en un clima seco, o que la expongas a la lluvia si es frecuente. 

Así, la planta se limpiará y se librará de las temidas plagas, evitando así numerosas enfermedades.

Agracejo

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¿Te gustaría tener en el jardín plantas que, además de ser bonitas y resistentes, sean medicinales y tengan propiedades nutricionales? Entonces plantéate la posibilidad de plantar agracejos. Hablamos de un arbusto que se cultiva sobre todo en Europa y que puede alcanzar los dos metros de altura.

Sus flores aparecen en primavera y rara vez pueden durar hasta el invierno, pero no ocurre lo mismo con sus frutos, que surgen precisamente en la época más fría del año.

Abelia

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La abelia es una planta con una hermosa floración, que en invierno desaparece para poder centrar todas sus energías en poder sobrevivir con frío, poco sol y mucha agua. Así que no esperes que luzca bella en invierno. A cambio, tendrás una planta que puede durarte perfectamente varios años seguidos.

Son peculiares sus hojas, muy pequeñas y ovaladas, y la disposición de sus ramas, que son muy finas y se colocan formando una figura ovalada.

Aligustre

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El aligustre es una planta o arbusto de origen chino, que soporta igual de bien la falta de luz y la ausencia de la misma, y que crece mucho más fuerte en los climas que no son extremos. Es decir, le viene muy bien no someterse a temperaturas muy altas ni a heladas. También necesita mucha agua, así que la lluvia no será un problema para ella.

Si cumples estas premisas, conseguirás disfrutar de tu aligustre durante mucho tiempo y, además, lo verás crecer hasta donde quieras. En ocasiones, si están bien cuidados, pueden llegar a alcanzar los dos metros de altura.

Boina 

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Esta es una de esas plantas cuyo nombre popular (el científico es Farfugium japonicum) deriva de su peculiar forma. Sus hojas son tan raras que por ello se conoce a esta planta como boina o capa de la reina. Estas tienen un color verde intenso, son perennes y pueden llegar a medir hasta 25 centímetros de diámetro.

Esta planta que, por otro lado, puede alcanzar los 70 centímetros de altura, ofrece muchas variedades. Todas ellas presentan la misma morfología, pero varían sus colores y sus tonalidades. 

¿Lo ideal? Si tienes espacio, combinar diferentes especies para lograr una sensación única en tu jardín.

Fotinia

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Lo bonito de esta resistente planta es que sus hojas cambian de color en función de la época del año en la que nos encontremos. En primavera son rojas, en verano violetas y en otoño y en invierno presentan un color más típico: el verde. Es habitual encontrar fotinias plantadas en grupo, en forma de arbustos y creando una original combinación.

Sin embargo, también es posible plantarlas en tu jardín, de forma aislada e incluso en macetas. Con ello, conseguirás una planta de lo más original y colorida y, asimismo, muy fácil de cuidar. Aunque no necesita mucha agua y le viene muy bien la luz del sol, ha demostrado soportar muy bien las inclemencias típicas del invierno.

Espino albar

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También conocido con el nombre de espino blanco (por el color que ofrecen sus flores cuando nacen), se cultiva prácticamente en todo el mundo. Pero, principalmente, se encuentra de forma más abundante en Europa, África y Asia.

Respecto a su cuidado y resistencia, no te preocupes si ves que en invierno va perdiendo progresivamente sus hojas. Lo hace, precisamente, para protegerse y para mantenerse fuerte durante toda esta estación. Es una planta muy poco exigente, capaz de sobrevivir a prácticamente cualquier situación meteorológica.

El espino albar ofrece flores y frutos sobre todo en las épocas más cálidas del año, y es habitual encontrarlo en forma de arbusto, y también plantado en macetas.

Acelga roja

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Si hay algo que llama la atención de esta planta comestible, aparte de sus curiosas hojas, es su espectacular tallo rojo. De hecho, también es llamada acelga de tallo rojo. ¿Lo mejor de su cultivo? Que crece de forma muy fácil y uniforme. 

Asimismo, es altamente resistente tanto a cualquier clima como a las diversas enfermedades a las que se exponen habitualmente las plantas. Y, por si todo esto fuera poco, si te cansas de tenerla en tu jardín o si se convierte en una planta demasiado grande… puedes podar sus hojas y hacer una riquísima ensalada con ellas, por ejemplo.

Conclusión

Como has podido comprobar, las plantas bonitas en tu jardín no son solo cosa del verano o de la primavera. También en invierno puedes disfrutar de los beneficios de estar rodeado de plantas en tu hogar.

De entre todos los tipos de plantas que te hemos propuesto, puedes elegir las que más te gusten o que mejor se adapten al espacio y a la estética de tu terraza.